Es el momento de pensar en los
aperitivos para la cena de Nochebuena o el día de Navidad y… ¡hay que
impresionar! Este bocadito es fácil de hacer y podéis dejarlo a fuego bajo en
el horno hasta el instante de comerlo. Les sorprenderá la mezcla de sabores.
Ingredientes:
2 patatas medianas
2 patas de pulpo cocidas y grandes
1 cucharadita de pimentón dulce
1 huevo pequeño
1 clara de huevo
Harina
Sal
50 grs de carne de membrillo
Palomitas de maíz
Balsámico de frutas del bosque(o de otro sabor que os guste)
Aceite de oliva
Preparación:
Cocemos las patatas con su piel
hasta que veamos que están tiernas pero sin que lleguen a deshacerse. Dejamos
enfriar.
A continuación, ponemos en la
picadora las palomitas y molemos bien sin pulverizarlas del todo.
Cortamos unas 12 rodajas de
pulpo, que nos servirán como base a nuestro aperitivo, y el resto lo picamos en
la picadora. Reservamos.
Pelamos las patatas y las
aplastamos con un tenedor, añadimos la carne de pulpo triturada, la cucharadita
de pimentón dulce y el huevo batido. Mezclamos bien y formamos bolitas no muy
grandes.
Metemos en el congelador una
media hora. Pasado este tiempo, sacamos
del congelador y rebozamos en clara de huevo y después por las palomitas
picadas. Freímos en aceite caliente, sacamos y escurrimos en papel absorbente.
Por último vamos a montar el
aperitivo: primero ponemos como base la rodaja de pulpo que teníamos
reservadas, encima colocamos un poquito de carne de membrillo y superponemos a
todo las bolitas pinchadas con un palillo. Rociamos con el balsámico y lo
servimos templadito.
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