Como postre, seguimos haciendo un
guiño a los alemanes con una tarta de manzana a la que se añade kiwi para ser
más original. Como siempre os sugiero, si no tenéis mucho tiempo, una buena
opción es comprar una pasta brisa y os ahorrareis algunos pasos.
Ingredientes:
Para la masa:
300 grs de harina
10 ml de aceite de oliva
60 grs de azúcar moreno
1 pizca de sal
8 cucharadas de agua
Para la crema pastelera:
½ litro de leche
4 huevos
1 clara
4 cucharadas de maicena
50 grs de azúcar
2 cucharadas de sirope de arce
1 rama de vainilla
2 cucharadas de azúcar
Para la guarnición de fruta:
2 manzanas
3 kiwis
1 limón
2 cucharadas de azúcar moreno
Preparación:
Primero vamos a hacer la masa.
Ponemos la harina en un bol en forma de volcán, añadimos el aceite, el azúcar,
la pizca de sal y mezclamos hasta obtener una masa arenosa.
Añadimos el agua, mezclamos todo
bien y formamos una bola con la pasta. Metemos en la nevera durante 30 minutos.
A continuación, vamos a preparar
la crema pastelera. En un cazo, ponemos la leche a calentar con la rama de
vainilla (a la que habremos hecho un corte a lo largo para que dé más aroma).
Lo dejamos hervir, retiramos del fuego y esperamos que se vaya templando.
Separamos las yemas de las claras, reservando una clara.
En un bol, batimos las yemas y el
azúcar hasta que la mezcla esté blanquecina. Añadimos el sirope de arce y la
maicena tamizada. Mezclamos bien todo. Retiramos la rama de vainilla de la
leche y vamos añadiendo poco a poco a la mezcla de las yemas. Movemos bien y
colamos la mezcla. Ponemos en un cazo al baño maría y ponemos al fuego,
removemos bien hasta que espese. Retiramos del fuego.
Montamos la clara a punto de
nieve y cuando esté bien montada añadimos las 2 cucharadas de azúcar, batimos
para mezclarlo bien y reservamos. Cuando tengamos la mezcla anterior fría,
añadimos la clara montada y mezclamos bien en movimientos envolventes con
cuidado. Reservamos.
Pelamos las frutas y cortamos en
finas láminas. Rociamos de limón las láminas de manzana para que no se pongan
oscuras.
Precalentamos el horno a 200°.
Sacamos la masa de la nevera y extendemos con un rodillo. Engrasamos un molde
desmontable y colocamos la masa en el molde. Extendemos sobre la masa la crema
pastelera y sobre ella vamos colocando la fruta alternando láminas de manzana
con láminas de kiwi. Espolvoreamos de azúcar moreno y horneamos unos 40 minutos
aproximadamente.
Receta obtenida de: www.lesrecettesdejuliette.fr
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