Y para continuar con nuestro día de comida andaluza, he preparado estas tortas locas típicas de Málaga. Todavía recuerdo la primera vez que las comí, me parecieron un auténtico manjar. Así que es normal que las coma con frecuencia, pero, sobre todo, las llevo de regalo cuando salgo fuera.
Ingredientes:
2 láminas de hojaldre
Para la crema pastelera:
125 grs de azúcar
½ litro de leche
50 grs de maicena
3 huevos
1 cucharada de azúcar vainillado
1 cucharada de mantequilla a temperatura ambiente
Para la crema de yema:
100 ml de agua
200 grs de azúcar
La piel de ½ limón
2 cucharadas de leche
1 cucharada de maizena
5 yemas de huevo
30 grs de mantequilla
Colorante naranja alimentario
Para el glaseado:
200 grs de azúcar glass
70 grs de agua
Para adornar:
1 frasco de guindas en almíbar
Preparación:
En primer lugar, vamos a preparar
la crema pastelera. Retiramos un poco de la leche a un bol y disolvemos la
maizena. Reservamos.
Ponemos el resto de la leche a
calentar con un sobre de azúcar vainillado. Mientras se calienta, en un bol
batimos los huevos, añadimos el azúcar y la leche con la maicena. Mezclamos
todo bien. Una vez que tengamos la leche caliente, añadimos poco a poco a la
mezcla anterior y ponemos en un cacito al baño maría, removemos sin parar hasta
que veamos que espesa, retiramos del fuego y una vez templada la mezcla
añadimos la mantequilla. Removemos bien y dejamos enfriar en un bol de cristal
tapado con papel film.
A continuación, vamos a preparar
la crema de yema. Ponemos el agua a calentar junto con el azúcar y la piel de
limón para hacer un almíbar, dejamos hervir unos 10 minutos. Mientras se nos va
haciendo el almíbar, en un bol ponemos la maizena con las dos cucharadas de
leche y las yemas de huevo. Movemos bien con unas varillas hasta tener una
mezcla homogénea. Pasados los 10 minutos del almíbar, retiramos del fuego,
retiramos la piel de limón y poco a poco vamos añadiendo a la mezcla de las
yemas de huevo, removemos sin parar y ponemos en un cacito al baño maría,
colándolo previamente para evitar que se formen grumos. Removemos bien hasta
obtener una crema espesa. Añadimos un poco de colorante si queremos que
nuestras tortas locas nos queden de un color naranja. Retirar del fuego y
reservar.
En tercer lugar, precalentamos el
horno a 200°. Cortamos en círculos las láminas de hojaldre, cubrimos la placa
de horno con papel de hornear y colocamos los círculos de hojaldre pinchándolos
con un tenedor para que no suban mucho y podamos rellenar mejor. Horneamos unos
10 minutos aproximadamente. Otra manera de hornear los círculos de hojaldre es
colocar sobre ellos una placa de horno para que haga de contrapeso y así
también quedarán hojaldrados pero no subirán.
Una vez tengamos todos los
círculos horneados los colocamos sobre una rejilla. Cuando estén fríos,
podremos empezar a montar nuestras tortas locas. En un círculo ponemos una
cucharada de crema pastelera, ponemos otro círculo encima y sobre éste
extenderemos la crema de yema. Hacemos este proceso hasta que tengamos todas
las tortas cubiertas. Colocamos media guinda en el centro de cada torta.
Ya estamos en el último paso, vamos
a hacer el glaseado mezclando en un bol el agua con el azúcar. Vertemos sobre las
tortas y dejamos reposar hasta que veamos que el glaseado se ha secado un poco.
Os aconsejo poner servilletas de papel debajo de la rejilla, ya que al verter
el glaseado la encimera se manchará, así que con el papel solamente lo
retiraremos y listo. Nuestra encimera estará limpia. ¡A degustarlas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario