Este postre es perfecto para esta noche. Requiere un poco de tiempo pero
el resultado, como siempre os digo, lo
merece. ¿No da pena darles un bocado? Tenéis que tener en cuenta que
necesitareis una serie de instrumentos (molde, ojos de decoración…), pero
consideradlo como una inversión al futuro.
Ingredientes:
Para el brownie
(será nuestro féretro donde va a reposar la calabacita principal):
250 grs de chocolate negro
175 grs de mantequilla
80 grs de azúcar
5 huevos
75 grs de harina
Para el bizcocho de
las calabacitas:
4 huevos
200 ml de aceite de girasol
300 grs de azúcar
300 ml de leche a temperatura ambiente
450 grs de harina
1 sobre de levadura tipo royal
1 cucharadita de pasta de vainilla
Una pizca de sal
2 cucharadas de mermelada de calabaza
Colorante naranja
Para el glaseado de
naranja:
2 claras de huevo
200 grs de azúcar glas
Un poco de aroma de naranja
Colorante naranja
Agua caliente (si hiciera falta)
Para decorar:
Ojos de azúcar
Cuchillos de azúcar
Fondant blanco
Fondant negro
Fondant rojo
Nocilla blanca
Sirope de maíz (para pegar la nariz y el fondant a las
calabacitas)
Bolitas pequeñas verdes de caramelo
Nocilla negra
Molde de silicona en forma de calabacitas (6 cavidades)
Sirope de fresa
Preparación:
Primero vamos a preparar el brownie.
Precalentamos el horno a 210°.
Untamos un molde cuadrado con
mantequilla. Fundimos el chocolate negro troceado junto con la mantequilla en
el microondas y ligamos bien la mezcla (tened cuidado de poner con la potencia
baja para que no se nos queme, aunque tengamos que ponerlo más veces). Batimos
los huevos con el azúcar hasta que estén bien esponjosos, añadimos la harina tamizada
y mezclamos, por último añadimos la mezcla de chocolate con mantequilla.
Movemos bien y vertemos sobre el molde. Horneamos durante 15 minutos.
Reservamos.
Ahora vamos a preparar el bizcocho de las calabacitas.
Precalentamos el horno a 180°.
Separamos las yemas de las
claras. Reservamos las claras.Batimos las yemas con el azúcar y añadimos el aceite,
la leche, la cucharadita de pasta de vainilla, la mermelada de calabaza y el
colorante naranja hasta obtener una crema homogénea. Tamizamos la harina con la
levadura y añadimos poco a poco hasta que esté todo bien mezclado.
Batimos a punto de nieve las
claras y las incorporamos con la mezcla anterior con mucho cuidado para que no
baje la masa, así nos quedará más esponjosa.
Distribuimos la masa sobre las
cavidades de calabacitas pero sin llenar del todo y horneamos durante 10
minutos. Sacamos del horno y repetimos la operación hasta terminar con la masa.
Una vez que tengamos todas las
calabacitas terminadas, cortamos por la parte que no tiene forma de calabaza
para igualarlas, untamos de nocilla blanca y colocamos otra mitad para formar
una calabaza completa. Vamos colocándolas sobre una rejilla, poniendo debajo
papel de horno.
A continuación, vamos a hacer elglaseado
de naranja. Batimos las claras de huevo hasta que estén un poco espumosas (no
montarlas a punto de nieve), sin dejar de batir, añadimos el azúcar glas hasta
obtener una mezcla más espesa, añadimos el colorante naranja y aroma de
naranja. Si nos quedara demasiado espeso podremos añadir un poco de agua
caliente.
Ahora vertemos sobre las
calabacitas el glaseado de naranja, hasta que terminemos. Como cae sobre el
papel vegetal con una cuchara aprovechamos y volvemos a echar por encima, nos
quedarán las calabacitas más jugosas. Colocamos con cuidado los cuchillitos en
la hendidura central. Dejamos secar.
Una vez secas, colocamos los ojos
pegándolos con nocilla blanca. Hacemos bolitas de fondant rojo para la nariz y
lo pegamos con ayuda de un pincelito mojado en sirope de maíz. Y después con el
fondant negro hacemos la boca, con el rojo la lengua y con el blanco los
dientes. Pegamos también con sirope de maíz.
Por último
,
cortamos el centro del brownie en forma de féretro y lo ponemos en la bandeja
donde vamos a servir. Untamos la parte de arriba de nocilla negra. Y colocamos
una calabacita zombie espolvoreamos la nocilla con un poco de bolitas verdes.
Colocamos alrededor más calabacitas y donde tenemos situados los cuchillitos
vertemos un poco de sirope de fresa para simular sangre.