Tenía la receta de estas
maravillosas pastas desde hace tiempo y ¡no sabéis cómo me puse de contenta
cuando encontré por fin el molde de madera para hacerlas! Para el relleno se
emplean dátiles, una de las frutas secas que más usan en el mundo árabe, pero
si no os gustan también podéis hacerlas de ciruelas pasas o con higos secos.
Son perfectas para tomar con un té verde.
Ingredientes (para unas 20 galletas aproximadamente):
Para la masa:
260 grs de sémola de trigo
60 grs de harina de repostería
130 grs de mantequilla a temperatura ambiente
20 ml de leche
40 grs azúcar glas
1 cucharada de agua de azahar
1 cucharadita de levadura tipo royal
1 pizca de sal
Para el relleno:
50 grs de dátiles sin hueso
1 cucharada de azúcar
1 cucharada de agua
1 cucharadita de agua de azahar
Preparación:
Tamizamos la harina junto con la
levadura y la pizca de sal.
En un bol, ponemos la sémola
junto con la mezcla de harina y el azúcar. Añadimos el agua de azahar, la leche
y la mantequilla, mezclamos todo bien.
Cuando tengamos una masa
homogénea, formamos una bola, envolvemos en papel film y metemos en la nevera
para que repose durante un mínimo de dos horas.
Mientras, podemos preparar el
relleno: trituramos los dátiles, el azúcar, el agua y el agua de azahar.
Mezclamos todo bien hasta obtener una masa compacta. Reservamos.
Precalentamos el horno a 180°.
Ahora, utilizaremos el molde
especial para preparar estas galletas.Formamos bolitas con la masa. Colocamos
dentro de la cavidad del molde una de las bolitas, ahuecamos y colocamos en el
centro un poquito del relleno, cubrimos con un poco de la masa para que se
cierre, apretamos bien para que se quede grabado el dibujo y damos un golpe
seco en la mesa con el molde para que se desprenda la galleta.
Así vamos repitiendo hasta
terminar la masa.
Horneamos durante 20 minutos
aproximadamente. No tienen que estar doradas.
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