Estas galletas son perfectas para hacer si queréis que los niños os ayuden. Les encanta cortar la pasta con el cortador de galletas y son fáciles de hacer. ¡Les encantará comerlas como si fuesen piruletas! También quedan estupendas si hacéis un cocktail porque decoran y están riquísimas como plato dulce.
Ingredientes:
480 grs de harina
3 cucharadas de maicena
½ cucharadita de sal
430 grs de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
200 grs de azúcar glas
80 ml de sirope de arce
3 yemas de huevo
Ralladura de ½ limón
1 cucharadita de extracto de vainilla
Leche para pincelar
Palitos de piruleta (aptos para hornear)
1 molde en forma de flor
Azúcar de colores (si no lo encontráis, ponéis azúcar en una
bolsita de plástico y mezcláis con un poco del colorante elegido. Removéis bien
y dejáis que se seque con la bolsa abierta)
Preparación:
Del total de la harina quitamos 3
cucharadas y sustituimos por las 3 cucharadas de maicena. Incorporamos la sal y
mezclamos.
Batimos -con ayuda del accesorio
pala- la mantequilla e incorporamos el azúcar tamizado. Añadimos el sirope de
arce y las yemas de huevo (incorporando de una en una).
Agregamos la ralladura de limón y
la vainilla y mezclamos. Por último, añadimos poco a poco la harina tamizada y
mezclamos todo. Envolvemos en papel film y ponemos durante 20 minutos en la
nevera.
Estiramos la masa dejándola con
un grosor de ½ cm y cortamos con ayuda del cortador en forma de flor. Ponemos
el palito en el centro, pincelamos con leche y tapamos con otra flor
presionando un poco para que el palito se adhiera bien. Pincelamos con leche y
ponemos en el centro una boquilla y espolvoreamos con azúcar de un color y
alrededor con azúcar de otro color.
Precalentamos el horno a 180 °.
Horneamos durante 10- 15 minutos.
Receta obtenida de: Gesine Bullock Prado
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