Si os gusta el queso fundido,
esta tarta es perfecta para una cena o para un aperitivo, si la cortáis en
cuadraditos. El jamón serrano es lo último que se añade, ya cuando la hemos
horneado, así evitamos que se endurezca con el calor. Sustituyendo al jamón,
también podéis poner por encima atún en aceite o bresaola, quedará igualmente
rica.
Ingredientes:
200 grs de queso brie
1 lámina redonda de hojaldre
3 cebollas moradas
2 melocotones
50 grs de jamón serrano en lonchas
3 cucharadas de azúcar moreno
2 cucharadas de mantequilla
Sal
Vinagre balsámico
Preparación:
Precalentamos el horno a 220⁰.
Pelamos y cortamos las cebollas
en forma de pluma. Ponemos en una sartén la mantequilla y sofreímos a fuego
lento durante 15 minutos. Añadimos el azúcar moreno y una pizca de sal y
cocinamos durante 15 minutos más.
Pelamos y cortamos por la mitad
los melocotones, los deshuesamos y los cortamos en gajos finos. Pelamos el
queso y cortamos en 12 trozos gruesos. Engrasamos el molde y ponemos la masa de
hojaldre cubierta con la cebolla caramelizada.
Repartimos por encima los trozos
de queso brie y los gajos de melocotón de manera intercalada y horneamos
durante 18 minutos o hasta que veamos que está doradita.
Retiramos del horno y repartimos
por encima el jamón. Rociamos con vinagre balsámico y servimos.
Receta obtenida de: La revista “Cocina” de Lecturas
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