Reconozco que este pastel es de los que visualmente más me gustan. Se sabe que el origen de este postre es británico y hay dos teorías de por qué ese nombre, pero no nos interesa tanto como cómo se realiza y cuál es su sabor. El que vaya “pegado” con mermelada, sin duda, es un acierto, y también la sutil capa de mazapán que lo envuelve. Haced finita esa capa, para que resulte muy “pesado”.
Ingredientes:
200 grs de mantequilla a temperatura ambiente
250 grs de azúcar
1 cucharada de vainilla en pasta
235 grs de harina con levadura
100 grs de almendras molidas
6 huevos
3 cucharadas de mermelada de albaricoque
250 grs de mazapán
Colorante rosa
Preparación:
Batimos la mantequilla con el
azúcar y la vainilla en pasta. Cuando tengamos una mezcla esponjosa vamos
incorporando los huevos de uno en uno y seguimos batiendo. Incorporamos la
harina tamizada y las almendras molidas y mezclamos.
Dividimos la masa en dos y a una
de ellas le añadimos unas gotas de colorante rosa. Mezclamos.
Engrasamos dos moldes de plum
cake y vertemos cada masa en cada molde. Precalentamos el horno a 180°.
Horneamos durante 25 minutos.
Pinchamos con un palillo y si éste sale limpio ya los tenemos horneados.
Colocamos los bizcochos de una
rejilla y dejamos enfriar.
Colocamos un bizcocho sobre el
otro y con ayuda de un cuchillo de sierra cortamos los bordes para conseguir un
rectángulo perfecto. Cortamos longitudinalmente por la mitad y así obtendremos
cuatro tiras de bizcocho. Untamos con mermelada las tiras de bizcocho y
colocamos una tira de bizcocho blanca y una tira de bizcocho rosa al lado (la
mermelada servirá de pegamento). Encima del bizcocho blanco colocamos el
bizcocho rosa y encima del rosa otro blanco.
Estiramos el mazapán dejándolo
con un grosor de 3 mm. Pincelamos todo el bizcocho con mermelada y colocamos
encima el mazapán. Vamos girando para que se vaya pegando el mazapán.
Receta obtenida de: megasilvita
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