Un día estaba viendo libros de
cocina en unos grandes almacenes. De repente vi a una señora que iba a comprar
dos libros iguales y pensé que tenía que ser un libro buenísimo. He descubierto
que para conseguir las mejores recetas lo mejor es hablar con la gente, así que
me acerqué y le pregunté si era bueno. Me contestó que creía que sí, que los
compraba para regalar porque ella era la autora. Así que un poco avergonzada le
pregunté si me lo podía dedicar y así lo hizo. Prometo que luego lo pagué. Es
el mejor libro de repostería sefardí que conozco.
Ingredientes:
8 huevos
80 gr. de aceite de oliva de 0,4°
100 gr. de azúcar
300 gr. de chocolate negro (he utilizado Nestlé Postres
Intenso)
50 gr. de azúcar para montar las claras
Preparación:
Separamos las claras de las
yemas. Batimos con la batidora las yemas junto con el azúcar hasta que estén
blanquecinas. A continuación se va incorporando el aceite, poco a poco para que
ligue bien. En un cazo aparte derretimos el chocolate al baño maría. Cuando
esté derretido lo separamos del fuego, dejamos que entibie un poco y lo
mezclamos con las yemas.
Montamos las claras a punto de
nieve añadiendo los 50 gramos de azúcar. Es muy importante que al separar las
claras de las yemas se haga bien, si cae un poco de yema en las claras no se
montarán.
Por último, mezclamos los dos
preparados –las claras montadas y la mezcla de las yemas y el chocolate– con
ayuda de una barilla. Lo ponemos en los vasitos en los que vayamos a servirlo y
lo dejamos en la nevera 24 horas. Podemos decorarlo con azúcar glass y fideos
de chocolate.
Receta del libro Dulce lo vivas de Ana Bensadón.
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