Para completar nuestro menú
peruano de hoy, os propongo este delicioso postre. Tiene un cierto parecido a
las natillas, al menos en su consistencia. La bondad de este postre es que
siempre sale bien. Si no tenéis termómetro, retirad el almíbar cuando el azúcar
se haya integrado bien con el Oporto.
Ingredientes:
1 lata de leche condensada (740 ml)
1 lata de leche evaporada (462 ml)
6 yemas
4 claras
1 cucharadita de esencia de vainilla
80 ml de Oporto
100 grs de azúcar
Canela en polvo
Preparación:
En una cazuela ponemos las leches
y revolvemos con una cuchara de madera sin parar de remover hasta que adquiera
una consistencia espesa y tenga un color ligeramente marroncito. Retiramos del
fuego.
En un bol ponemos las yemas, añadimos la vainilla y
removemos bien. Añadimos poco a poco la mezcla anterior hasta conseguir una
mezcla homogénea. Reservamos.
Aparte, ponemos en un cacito el
azúcar, cubrimos con el oporto y ponemos al fuego, cuando alcance 105° el
termómetro retiramos.
Batimos las claras a punto de
nieve y echamos poco a poco el almíbar caliente. Batimos hasta que estén las
claras bien espesas.
Pasamos las claras montadas a una manga pastelera con una
boquilla rizada.
Ponemos la mezcla en los
recipientes donde vayamos a servirlo, y sobre ésta repartimos el merengue con
nuestra manga pastelera. Espolvoreamos de canela.
Receta obtenida del libro “Las artes del Perú”.
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