domingo, 30 de noviembre de 2014

Tarta de la Provenza

Éste es uno de los platos que más gustan en casa. Suelo reservarla para las ocasiones especiales, así están expectantes el día que la preparo. Se requiere un poco de tiempo, pero es muy fácil de hacer y siempre sale perfecta, solo hay que tener maña para el enrejado de la parte de arriba. Podéis prepararla el día anterior y calentarla en el momento de servir.

Ingredientes:

Dos paquetes de pasta brisa
Una berenjena grande
Dos calabacines
Una cebolla
Un diente de ajo
150 gr. de queso de gruyère
100 gr. de queso parmesano rallado
Un bote grande de tomate troceado
Un huevo
Sal
Romero
Orégano  

Preparación:

Cortamos la cebolla en trocitos pequeños y la rehogamos en una sartén con un poco de aceite. Cuando esté transparente, añadimos el tomate troceado, un ajo picadito, una pizca de romero y otra de orégano y salpimentamos. Dejamos que se rehogue todo durante unos minutos y lo reservamos.
Calentamos el horno a 180°.

A continuación, cortamos la berenjena en cuadraditos y la rehogamos en un poco de aceite hasta que esté blandita. Una vez que se haya pochado, la colocamos en un chino para que escurra bien el aceite. Reservamos.

Hacemos la misma operación que con la berenjena con los dos calabacines: los cortamos en daditos, los rehogamos hasta que estén blandos y los escurrimos para eliminar el excedente de aceite. Lo reservamos.

Extendemos en un molde desmontable, previamente rociado con spray antiadherente, una pasta brisa. La pinchamos con un tenedor para evitar que suba y la metemos en el horno previamente calentado, unos ocho minutos. Una vez transcurrido ese tiempo, sacamos el molde y colocamos sobre la pasta brisa una capa de queso gruyère. Iremos superponiendo capas con los rehogados que hemos preparado previamente: encima del queso, extendemos una capa de las berenjenas; a continuación, una capa del preparado de tomate; y encima una de calabacín. Sobre la capa de calabacín, espolvoreamos el queso parmesano rallado. Y de nuevo, extendemos otra capa del sofrito de tomate. Por último, terminaremos con otra cobertura de lonchas de queso gruyère.


Para terminar el plato solo nos queda hacer el enrejado: extendemos la otra pasta brisa y la hacemos tiritas que iremos entrecruzando hasta cubrir todo el molde. Pincelamos con huevo batido y metemos en el horno unos 30 minutos –como siempre digo, dependerá del horno que uséis. Se sirve caliente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario