Hoy vamos a utilizar para estos cupcakes dos de las cosas que más les
pueden gustar a los niños –cuando era pequeña no existían las galletas Oreo
pero de los conguitos dábamos buena cuenta en casa. Así que si tenéis niños
pequeños cerca os pueden ayudar en la cocina, eso sí calculad las cantidades,
que seguro que alguna galleta o algún conguito “desaparecen” por arte de magia.
El resultado: delicioso.
Ingredientes:
Base de Oreo:
160 grs de galletas Oreo (sin el relleno)
80 grs de mantequilla derretida
1 cucharada de cacao en polvo
Relleno de cacahuete:
225 grs de queso tipo Philadelphia
110 grs de mantequilla de cacahuete
150 grs de azúcar moreno
2 huevos a temperatura ambiente
1 cucharadita de pasta de vainilla
75 grs de nata líquida
Para la cobertura:
140 grs de chocolate negro para fundir
36 conguitos
Preparación:
Primero vamos a preparar la base de oreo. Precalentamos el horno a
175°. Trituramos las galletas junto con la mantequilla y el cacao. Cuando
tengamos la mezcla homogénea colocamos 1 cucharada en cada molde y presionamos
(yo he usado cápsulas de silicona, si no tenéis podéis utilizar cápsulas de
papel, que tendréis que engrasar y colocar en la bandeja de cupcakes).
Horneamos durante 5 minutos y sacamos del horno.
A continuación, haremos el relleno. Batimos el queso y la
mantequilla de cacahuete a velocidad media hasta que esté todo bien mezclado.
Añadimos el azúcar moreno y mezclamos.
Incorporamos los huevos de uno en uno, añadimos la vainilla y la nata. Cuando esté
todo bien incorporado, vertemos sobre la base de oreo y llenamos las cápsulas
(como no suben, podemos rellenar el molde hasta casi la superficie). Horneamos
durante 15 minutos, sacamos del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Luego meteremos en la nevera durante 1 hora como mínimo.
Por último realizaremos la cobertura. Fundimos el chocolate a fuego lento y
cubrimos los cupcakes, colocaremos sobre cada uno de ellos 3 conguitos.
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